Clara se separa de su hijo Hugo ya que el ómnibus donde eran pasajeros cae a un barranco. Hugo sobrevive y queda sin un zapato. Clara hace todo para recuperar a su hijo. Hugo es manipulado por una humilde familia, que lo mantiene encadenado cada vez que se escapa. Iván, un asistente de un circo, lo encuentra y al ver el cautivero en que vive, paga para tenerlo. Mientras Clara busca sin parar a su hijo, la policía le comunica que su hijo está muerto legalmente, ella cree que su hijo aún sigue con vida. Pasado los años, Clara y su familia se mudan a Lima, ella se hace costurera en el emporio de Gamarra y abre una tienda de vestidos de novia. En la misma galería está la tienda de Maria Eduarda Bermúdez, una mujer adinerada y con mucha ambición quien junto a Giovanni, su novio, y los ayudantes Igor y Dumancia; ven en Clara una rival a quien temer y tratan de acabar con ella en todo momento.